Y jugamos con el tiempo
Y nos leímos cuentos
Y nos abrazamos el alma
Decir no, era gritar sí.
Decir sí nunca fue suficiente.
No hace falta escribir nada
tú y yo hablamos sin voz.
Porque aunque estamos lejos
todo me dice que estás aquí.
Todo y nada. Ir y venir.
Al final todo será como el primer día.
El rumbo cambiará y nos arriesgaremos.
Este y Oeste.
El mundo será nuestro.
Tuyo y mío, de los dos.
Y la música se hará infinita,
nos seguirán todas las "y" que nos unieron.
El último día,
veremos en nosotros mismos el rostro de Dios.
nos seguirán todas las "y" que nos unieron.
El último día,
veremos en nosotros mismos el rostro de Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario